El tratamiento con Plasma Rico en Plaquetas (PRP) promueve la regeneración celular, retrasando el proceso de envejecimiento.
Consiste en aplicaciones intradérmicas de factores de crecimiento que se encuentran contenidos en las plaquetas, obtenidas a partir de un proceso de centrifugación de una muestra de sangre.
Al tratarse de material biológico autólogo (obtenido del propio paciente) se minimiza el riesgo de reacciones inmunes.
No requiere hospitalización ni anestesia y el tiempo por sesión estimado no supera los 30 minutos.
Como resultado, por las cualidades del PRP, se obtiene una piel más firme, luminosa, con atenuación de la arrugas y por ende de aspecto mas juvenil.
También ha demostrado ser de gran ayuda en el tratamiento de la celulitis en todas sus formas, las estrías, y la pérdida de cabello.